A mediados de este mes, los concejales Jorge López González, Sergio Reinoso y Jorge Santillán, presentaron una denuncia penal en la Justicia y otra de carácter administrativo en contra del presidente del Concejo Deliberante de Huillapima, Juan Gutiérrez, por una supuesta incompatibilidad con su cargo de directivo docente. Según aseguran, esto no es nuevo, sino que viene desde hace dos años.
Gutiérrez responde al sector político del intendente Omar Soria, y se entiende que éste, como todo jefe político territorial, haga todo lo posible para no dejar el control del órgano legislativo en manos de sus opositores. Por tal razón, en la última sesión ordinaria, cuando se produjo la renovación de ediles y autoridades, Gutiérrez aprovechó un resquicio y se instaló como presidente del CD. Para los concejales opositores, fue todo un arrebato institucional. “Él mismo se arrogó de facto la Presidencia del cuerpo», indicaron.
Fue por ese hecho que denunciaron a Gutiérrez por abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Pero además están convencidos de que el hombre se encuentra en situación de incompatibilidad con dos cargos docentes que tiene.
«A más de ser concejal y presidente de una comisión de trabajo y vocal en otras, resulta titular de un cargo directivo, ya que es director del Centro de Educación Agrícola (CEA) de Nueva Coneta, y a su vez es docente en la Escuela Agrotécnica de Tercera Categoría de Nueva Coneta», expresaron en la presentación realizada en el Ministerio de Educación de la Provincia.
Dicen los ediles que el denunciado no solo estaría violando el “Régimen de Acumulación de Cargos» de la Provincia, sino que además ocasionaría «un grave perjuicio al erario, al encontrarse percibiendo haberes en todas las funciones».
Frente a eso, el Concejo Deliberante de Huillapima explicó que Gutiérrez ejerce su cargo político en forma “ad honorem” y que fue autorizado por la misma cartera educativa provincial para ello, pero en 2020. Su mandato como concejal se extenderá hasta 2023. Y que solamente cobraría sueldo como director del Centro de Educación Agrícola de Nueva Coneta.
Entrevistado por un medio audiovisual, Gutiérrez aseveró que su situación está en regla y que decidió seguir cobrando su cargo docente y no la dieta como concejal por cuanto, al tener más de 30 años de antigüedad, percibe un “sueldo considerable”, expresó.
Para la ministra de Educación, Andrea Centurión, el caso del concejal capayense no es nuevo. «Nosotros hemos tomado conocimiento de la situación en una asamblea, en 2020, y automáticamente hemos juntado la documentación porque considerábamos que existía una supuesta incompatibilidad y lo hemos remitido a la Dirección de Sumarios el año pasado”, dijo a este diario. De modo que “estamos esperando que se corroboren los datos y se definan las medidas para seguir», indicó.
A criterio de Centurión, “más allá de que no cobre el sueldo de funcionario legislativo municipal, tiene una carga horaria que cumplir que resultaría incompatible con la dirección que tiene a cargo”, agregó. Más aún, de acuerdo con las normas administrativas que rigen el sector docente, Gutiérrez no podría ser concejal y al mismo tiempo director de una escuela. En todo caso, sí podría ejercer la docencia pero en un cargo simple.
En otras palabras, aunque no exista una incompatibilidad salarial, es claro que el presidente de un concejo deliberante no puede ser al mismo tiempo director de una escuela. Sencillamente porque coincidirían las horas de dedicación que exige cada uno de esos cargos.
O conduce una escuela o conduce un concejo deliberante. Ambas funciones exigen una dedicación “full time”, o al menos la mañana completa de lunes a viernes. Es absurdo pretender que el permiso especial rija para solo para un jueves, que es el día habitual de sesiones en los concejos de la provincia.
Gutiérrez y el intendente Soria son conscientes de que están incumpliendo normas claras de compatibilidad en la función pública.
Fuente: El Ancasti
