Los radicales señalan como un “error táctico” que los legisladores se fueran. “La nota era la ausencia de Máximo Kirchner y ahora es que se fueron ellos”. Para la Coalición Cívica fue un “paso de comedia”. El diputado Manes pidió más “empatía” y respeto
Lo habían anticipado. Los legisladores del PRO llegaron al Congreso de la Nación para participar de las 140 Asamblea Legislativa con un idea en mente: si nos agreden nos levantamos y nos vamos. La pregunta a dilucidar era cuál iba a ser el límite.
Y el límite fue cuando el presidente Alberto Fernández hizo referencia a la causa judicial respecto de la toma del crédito con el Fondo Monetario Internacional que se le inició al ex presidente Mauricio Macri y varios ex funcionarios de su gestión. En ese momento, los 50 diputados y los 9 senadores del PRO comenzaron a los gritos y se retiraron del recinto de la Cámara de Diputados. Sólo habían pasado 40 minutos de un discurso que terminó siendo de poco más de una hora con treinta minutos.
“Lo habíamos anticipado”, se justificó un diputado del PRO. “No podíamos seguir aguantando”, agregó. Sin embargo, la falta de paciencia no cayó del todo bien entre sus socios principales y sumaron tensión hacia adentro de Juntos por el Cambio.
“La verdad es que fue un error. La nota hoy iba a ser que no estaban presentes ni Máximo Kirchner ni ‘Wado’ De Pedro, los dos representantes de La Cámpora más importantes. Ahora es que ellos se levantaron y se fueron ellos”, explicó un diputado de Evolución radical.
En la misma línea se mostró un senador radical quien definió como un “problema táctico” de parte de los legisladores del PRO. “Nosotros sabíamos desde anoche que esa iba a ser la intención, pero habíamos avisado que nos quedábamos hasta el final”, agregó.
Sobre la salida de los legisladores del PRO del recinto, Mario Negri dijo que “tienen derecho porque se sintieron absolutamente ofendidos cuando el Presidente habló de una querella penal que ya había anunciado hace un año. La UCR se quedó, la CC también, Evolución lo mismo y los bloques chicos también. Pero eso no es lo más importante, eso a nosotros no nos va a dividir”. Aunque el presidente del bloque de la UCR justificó la salida de sus colegas, también entiende que la reacción fue “desproporcionada”.
El legislador Facundo Manes, quien quedó solo en el recinto ya que quienes estaban a su alrededor era del PRO y se fueron, criticó las “chicanas” de Alberto Fernández al macrismo, pero se diferenció de sus compañeros de Juntos por el Cambio que abandonaron sus bancas: “No es el camino, no es por los extremos”.
“Me preguntan por qué me quedé. Ya probamos con no escucharnos y así estamos. No coincido con muchas cosas del discurso, pero si no lo escucho no puedo opinar. Más EMPATÍA y menos grieta = más desarrollo inclusivo. La Argentina del futuro será de los que nos quedamos”, escribió en su cuenta de Twitter.
Desde la Coalición Cívica, el partido de Elisa Carrió, fueron mucho más lejos en el análisis e hicieron referencia a que el PRO “tiene problemas de liderazgo” y a la hora de catalogar la actitud de sus socios lo hicieron como “un paso de comedia”.
“El discurse fue pobre, ninguno de nosotros se sintió interpelado como para tener que irse la verdad. Muchas de las cosas que se podrían tomar como una agresión ya se han dicho tantas veces que no tiene sentido”, agregó un fuente del bloque que responde a Lilita Carrió.
El discurso
Donde hubo acuerdo en el bloque opositor fue en catalogar el discurso presidencial como “pobre”. “Fue un discurso que demuestra al Presidente de todos los argentinos como incorregible. No tiene sentido de la responsabilidad y del momento de debilidad que tiene la Argentina, de los problemas que tiene que resolver y de la fragmentación de poder que lo debe sostener a él. Vinimos pensando en encontrar otro discurso, cuando más necesita dialogar con todos, pero me parece que fue un discurso para la interna del Frete de Todos”, dijo el jefe del bloque radical de diputados. “Habló para la interna del FdT”, recalcó Negri a la prensa acreditada en Pasos Perdidos.
Por parte, Maximiliano Ferraro, diputado y presidente de la CC ARI señaló que “estamos viendo un presidente cansado y que solo habla del pasado. Necesitamos dejar atrás la pandemia y escuchar cómo el gobierno piensa solucionar los problemas de hoy como la inflación, la pobreza, el empleo y así avanzar hacia el futuro”.
Al igual que sus colegas radicales, dijo que “no deja de sorprender el nivel de cinismo del Presidente al disfrazar los motivos reales que persigue la reforma de la Justicia: impunidad. Es una falta de respeto a las víctimas de la inseguridad a las que este gobierno les ha soltado la mano por completo”.
“El ataque del presidente a la Corte Suprema fue irrespetuoso y sin decoro alguno. Vemos un gobierno que no encuentra rumbo, sin sentido de estado que juega a la estrategia de ´cuánto peor mejor´. Si todos tiramos de la cuerda se rompe el país y sufren millones de argentinos”.
Por su parte, el diputado Rogelio Frigerio, del PRO, dijo que el Presidente “busca que la oposición colabore y luego nos ataca, insulta y miente. Un claro reflejo de cómo el kirchnerismo maneja el país. Basta de mirar para atrás, los argentinos necesitamos futuro y certezas”.
Un dato no menor y que es una señal para lo que viene. Mientras los legisladores del PRO se retiraban, el presidente del interbloque de Juntos por el Cambio en el Senado, Alfredo Cornejo, le gritaba al presidente Fernández “¡Alberto, no tenés los votos (los votos propios para el acuerdo con el FMI)! ¡Alberto mentiroso!!”.
“Alfredo, vos sabes que yo no miento” respondió un Presidente al que, desde la oposición, nadie le creyó.