CIUDAD DE RECREO
Para la madre de la adolescente, la drogaron en un boliche para luego ultrajarla. Ocurrió el 25 de febrero.
La Fiscalía de Instrucción de la Sexta Circunscripción Judicial a cargo de Jorgelina Sobh, imputó a un hombre de 30 años por presunto «abuso sexual con acceso carnal» en perjuicio de una adolescente de 16.
El hecho fue denunciado por la madre de la joven, quien en diálogo con El Ancasti informó que ocurrió el domingo 25 de febrero a la mañana.
Indicó que la noche anterior, la chica en compañía de una amiga concurrió a un boliche muy conocido «donde van chicos de 14 años para arriba».
«Aproximadamente a las 7, como no regresaba a casa salí a buscarla. A eso de las 8 llegó pero por sentido contrario a la dirección del boliche», agregó. Recordó además que la chica llegó descalza, con un buzo ajeno y su pollera.
«La reté y le pregunté dónde había andado. Me dijo que no sabía, que no recordaba nada. También le pregunté por su calzado y me contestó que no sabía». Sostuvo que poco después llegó a la casa un muchacho «que me entregó una bolsa con el calzado de mi hija. Le pregunté de dónde había sacado eso y me contestó que habían estado en una ‘juntada’, en la casa de otro chico que nombró. Dijo que en esa casa también estuvo mi hija».
Comentó además que la joven le respondió en reiteradas oportunidades que sólo recordaba haber estado en el boliche con unos amigos y que «de después no recuerda nada».
«Estaba como drogada. Le pregunté si había estado con un chico pero seguía sin recordar. En eso, una amiga relató que ella le dijo que sentía dolores en sus partes íntimas. Al enterarme de estas cosas llamé a la Policía. Ella se desmayó. Poco después me di cuenta de que tampoco llevaba su ropa interior y llegó la Policía», manifestó.
Aseguró que «otra vez llegó el mismo muchacho que había venido primero, pero en moto, con una bolsa con botas, la remera y la ropa interior de mi hija que le entregué a los policías. Me pidió que le devuelva el buzo que decía que le pertenecía, aunque ella decía que debía ser de su amiga».
La adolescente fue trasladada al Hospital Liborio Forte donde quedó internada. En ese momento «el médico dijo que mi hija estaba muy alcoholizada pero no le hicieron análisis para saber si estaba drogada o alcoholizada», cuestionó la mujer.
Sostuvo que «recién el lunes a las 14 le hicieron los hisopados», cuando le habían dado el alta horas antes: “Lo bueno que hicimos es no bañarla entre el domingo y el lunes”, apuntó.
«La doctora nos explicó que, más allá del tiempo transcurrido en la toma de las muestras, se podía encontrar si hubo abuso. Ese domingo denuncié todo en la Policía y en la Justicia me dijeron que era todo muy confuso, que van a esperar los informes», remarcó.
«Yo digo que la drogaron porque es la única forma de que ella no pueda defenderse», finalizó la progenitora.
Investigación
Fuentes judiciales informaron que la denuncia fue remitida a la fiscal subrogante Virginia Duarte Acosta, quien ordenó las primeras medidas. Se activaron los protocolos para casos de abuso sexual y en el hospital se hicieron pericias psicológicas, hisopados y tratamientos de profilaxis.
La causa pasó a ser investigada por la fiscal titular, Jorgelina Sobh.
