EN CAPAYÁN
Fuentes policiales informaron que tras una denuncia penal radicada en la Comisaría de Huillapima, Capayán, por un supuesto delito de “grooming”, numerarios de la División de Ciberdelitos de la Policía de la Provincia, dependiente del Departamento Investigaciones Judiciales, iniciaron una tarea investigativa. Ésta se llevó a cabo conjuntamente con sus pares de la seccional mencionada. Según se precisó, sumariantes de la Unidad Judicial Nº 9 concretaron una orden de allanamiento dispuesta por el Juzgado de Control de Garantías, a cargo del juez Marcelo Hadel Sago, a solicitud de la Fiscalía de Instrucción en turno del Distrito Sur. Luego, fue remitido a la Fiscalía de Instrucción de Séptima Nominación, con competencia en ciberdelitos, a cargo de la fiscal Valeria Reyes.
Al respecto, se indicó que en una vivienda ubicada en el barrio España de Huillapima, los policías secuestraron un teléfono celular, que estaría vinculado a la causa que se investiga. Finalmente este elemento fue puesto a disposición de la Justicia interviniente, desde donde se indicaron las medidas a seguir.
El “grooming” es el acoso de adultos a niños, niñas y adolescentes, a través de las nuevas tecnologías de información y de comunicación (NTIC), redes sociales, teléfonos celulares o internet. El agresor busca persuadir para crear una “amistad” y de esta manera lograr un acercamiento que le permita obtener imágenes, vídeos con contenido sexual e inclusive, un posible acercamiento físico para abusar sexualmente de la víctima.
A través de este delito, el “groomer” –así se define a este tipo de acosador- estudia a la víctima al conocer cuáles son sus intereses, gustos, actividades, entre otros. Generalmente, el primer contacto se realiza en las redes sociales y en ocasiones el agresor falsifica su identidad pasándose por otro chico. Una vez consolidada la relación de amistad y la confianza, el agresor no duda en empezar el acoso sexual, solicitando material pornográfico o un encuentro sexual.
Tanto del Sistema de Protección de chicos y chicas como desde el ámbito de la Justicia exhortan a padres, docentes y demás personas que tengan sospechas o sepan sobre abusos sexuales a niños, niñas y a adolescentes a que realicen la denuncia penal. Al respecto, advirtieron que los delitos contra la integridad sexual a chicos y chicas son de instancia privada pero de acción pública.

