Lo realizó el empresario Cristian Guillou
Es por el desempeño en las causas vinculadas por la posesión de Wika, donde también estaba involucrado Edgar Bacchiani.
Mientras avanzan dos procesos judiciales en su contra, ingresó un nuevo pedido de jury contra el fiscal Hugo Costilla. Este lo presentó el empresario y exfuncionario municipal Cristian Guillou con el patrocinio del abogado Eduardo Aguilar, acusando al fiscal de “mal desempeño de sus funciones”.
El planteo se suma al realizado por el diputado provincial Hugo Ávila (Frente Amplio Catamarqueño) contra el fiscal por el escándalo de las absoluciones pagas, donde lo acusó de «haber incurrido en causales de mal desempeño en sus funciones e ignorancia inexcusable del derecho» y la investigación que abrió la Corte de Justicia sobre el acuerdo firmado entre víctimas y victimarios del asalto en Parque América.
La presentación de Guillou está vinculada al escándalo de la compra-venta y posesión del local bailable “Wika” entre el empresario y el trader hoy alojado en el penal de Miraflores, Edgar Adhemar Bacchiani. Por este hecho, se abrieron varias causas judiciales siendo que los expedientes vinculados al fuero penal, recayeron en la Fiscalía de Costilla. Hace unas semanas, el fiscal fue removido de la causa que inició el propio Guillou contra Bacchiani por una supuesta insolvencia fraudulenta.
El fiscal pretendía solicitar la desestimación y archivo de las actuaciones, pero el juez de Control de Garantías, Marcelo Sago, rechazó las actuaciones del fiscal y le quitó la causa.
En la presentación, Guillou relató una serie de sucesos que a su criterio dan cuenta de que Costilla “habría sido parte de la trama de complicidad que generó que quedaran impunes graves hechos de estafa que afectaron a toda la sociedad catamarqueña”. En este sentido, el empresario advierte sobre “dos graves motivos” que lo llevan a denunciar al fiscal en relación con los ilícitos relacionados con Edgar Adhemar Bacchiani. “En primer lugar, la falta de investigación de las denuncias y la omisión en la recolección de pruebas, además de la arbitrariedad y contradicción con la jurisprudencia vigente en las imputaciones realizadas en mi contra”, señaló Guillou.
El empresario acusó al fiscal de “arbitrariedad” al haber intentado imputarlo por “el delito de usurpación y dictar un lanzamiento a pesar de la existencia de una causa civil que fundamentaba la inexistencia del delito”.
Para el denunciante, “la existencia de una causa civil (iniciada por el propio Guillou) que aborda la cuestión de la posesión y los derechos sobre el inmueble deberían haber sido un factor determinante para el fiscal”. Sin embargo, consideró que Costilla tenía “una insistente voluntad” de imputarlo por usurpación a pesar del proceso civil.
En este caso, Guillou se refirió a las denuncias que realizaron las exparejas de Bacchiani, Zaraive Garcés Rusa y Sofía Piña por usurpación (cuando Guillou ante el incumplimiento en los pagos por parte del trader, decidió retomar la posesión de Wika).
Más adelante y en la misma causa, Guillou sostiene que la Fiscalía de Costilla “nunca llamó a Garcés Rusa para ratificar su supuesta denuncia ni a Sofia Piña para aclarar su rol, generando una grave omisión que afecta la integridad del proceso investigativo”.
En este marco, consideró que en el caso de Piña se generó una “confusión sobre la denuncia” ya que la última pareja de Bacchiani “se presentó como damnificada y gestora, lo que provocó confusión sobre su papel en el caso” y añade que “la falta de aclaración respecto a su posicionamiento debió ser atendido por la Fiscalía para entender mejor el contexto de su denuncia”.
“La omisión de ratificar acusación plantea serias preocupaciones sobre la validez de cualquier documento firmado bajo coacción especialmente considerando que Garcés Rusa posteriormente denunció haber sido coaccionada para firmar documentos bajo amenazas de prisión”, dijo Guillou haciendo referencia a que Garcés Rusa posteriormente apuntó al abogado Carlos Correa por haberla obligado a denunciarlo bajo amenazas de que podría ir presa.
También advirtió que la Fiscalía de Costilla ha mostrado “contradicciones en la investigación”, dando lugar a la participación del comerciante Alejandro Segli como querellante particular, “lo cual no se justificó debidamente”.
Más adelante, consideró que “la fiscalía elevó solicitudes de allanamientos y desalojo, dando curso a la misma sin una correcta evaluación de su legitimidad”.
Sobre esta causa, el denunciante advierte que el Juez de Control interviniente rechazó el pedido de desalojo de Costilla hasta tanto se resuelva el pleito en el fuero civil.
Con relación a la denuncia que él presentó contra Bacchiani, Guillou cuestionó “la falta de investigación y archivo” en este expediente por parte de Costilla. “La falta de seriedad en la investigación de los hechos denunciados y la conducta del fiscal evidencian una posible intención de ocultar la verdad en una situación que afecta la paz social en la comunidad catamarqueña”, dijo el denunciante.
Finalmente, Guillou vinculó las causas del escándalo Wika donde intervino Costilla con las últimas novedades en la causa de RT inversiones. En este sentido, hizo referencia al pedido de la Justicia Federal al fiscal para que envíe todo lo vinculado a Rolón Reynoso en el marco de la causa por el asalto en Parque América. “En el marco de la causa penal en la que se investigaron los hechos antes señalados debe dejarse expresamente aclarado los hechos concretos que acreditan el mal desempeño del señor fiscal, quien actuó como cómplice de las financieras obstaculizando la investigación de los graves hechos que se pusieron de manifiesto”, sostuvo el denunciante a lo que agregó: “La negativa de Costilla de contribuir con la investigación de las estafas de la financiera del Clan Bulacios es congruente con la conducta que siguió en el expediente antes mencionado, ha demostrado una voluntad manifiesta de obstaculizar la verdad”.