Por contraste, la agresiva intransigencia del presidente Javier Milei da mayor nitidez a la flexibilidad de sus operadores.
En el inicio del debate parlamentario de la Ley Ómnibus, que contiene la aprobación del polémico megadecreto, se destacan las modificaciones que el oficialismo estaría dispuesto a admitir a favor de dos grupos de gobernadores apalancados en actividades productivas.
Ignacio Torres (Chubut), Alberto Weretilneck (Río Negro), Claudio Vidal (Santa Cruz), Gustavo Melella (Tierra del Fuego) y Rolando Figueroa (Neuquén) adoptaron una estrategia conjunta de presión que fue efectiva y luego emularon los de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Jujuy y Tucumán, provincias con intereses en los biocombustibles.
Entre dos objetivos contrapuestos extremos, sacar el paquete sin cambios o rechazarlo en bloque, comienza a cobrar fuerza la posibilidad de una alternativa intermedia, fundada en las necesidades mutuas.
Entre los extremos de aprobar el plan libertario o rechazarlo en bloque, comienza a afianzarse una alternativa intermedia
La foto con el gobernador Raúl Jalil y el mensaje que difundió el lunes el ministro del Interior Guillermo Francos por su cuenta de X sirve como síntesis. Francos priorizó el contenido sobre inversiones en minería y litio en Catamarca, que se proyectarían a 15 mil millones de dólares en total.
“En esta línea, coincidimos sobre el impacto positivo que tendrán en la provincia las reformas al régimen de grandes inversiones contempladas en la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”, informó.
En el punto siguiente del posteo, añadió que “el gobernador también planteó el impacto que tiene la reforma del impuesto a las Ganancias, que implica una pérdida del 7% de la coparticipación que recibe la provincia”.
La secuencia contiene una lógica disonante con el fanatismo cerril que verbaliza el Presidente.
El toma y daca abierto con los regímenes pesquero y de los biocombustibles podría extenderse. En el caso de Ganancias, las perjudicadas fueron la totalidad de las provincias, que buscan una compensación.
La duda es si Milei bendecirá en última instancia las tratativas que cierre Francos. Sus manifestaciones públicas y los agraviantes mandobles que descarga sobre el Congreso indicarían lo contrario, pero podrían ser una puesta en escena, un juego de roles.
La voluntad de acercar posiciones y sondear alguna síntesis fue manifestada ayer por la senadora nacional Lucía Corpacci, luego de una reunión con sectores de la alianza oficialista que le pidieron el rechazo a la propuesta libertaria.
Corpacci marcó varios temas con los que disiente, como la delegación de facultades plenipotenciarias en el Ejecutivo o la privatización de YPF y el Banco Nación, pero enfatizó que fue gobernadora y por lo tanto sabe de la importancia que tienen el diálogo y las negociaciones políticas.
Además, se refirió a la baja de la coparticipación devenida de los cambios introducidos en Ganancias y la necesidad de compensarla coparticipando, por ejemplo, el impuesto PAIS.
Esto es: Corpacci se abstuvo de rechazar la totalidad de la propuesta libertaria, como más de uno esperaba, y se mostró abierta al diálogo.
Esta postura concuerda con la de Jalil y ratifica un rumbo para los legisladores nacionales del oficialismo catamarqueño después de la reunión que el Gobernador mantuvo con ellos.
No es a todo o nada.