CON DETENCIÓN DOMICILIARIA
Durante la mañana de ayer, pese al feriado nacional, la fiscal Paola Pintos imputó e indagó en la Fiscalía General a un hombre de 45 años, quien por el momento sólo será identificado con sus iniciales (S.E.), por el supuesto delito de abuso sexual calificado.
Por tratarse de un hecho de instancia privada y del que habría resultado víctima un familiar del detenido, los investigadores fueron cautos al momento de brindar información en relación con el hecho, indicando que S.E. fue detenido el día jueves a la madrugada.
Sin embargo, no fue llevado a la comisaría para ser alojado en el calabozo, sino a su domicilio, en un barrio de la zona norte de la Capital. Esto en razón de que al ser examinado por el médico en Sanidad Policial, el profesional indicó que S.E. no podía permanecer alojado en una dependencia policial por el estado de salud que atraviesa.
Fue por ello que la fiscal de Instrucción N° 3 dispuso una consigna policial para el domicilio del detenido, quien en la mañana de ayer pasadas las 10.00 fue llevado a la Fiscalía General para la indagatoria.
Sentado ante la fiscal, quien le hizo conocer el hecho que se le acusa, abuso sexual calificado, y las pruebas obrantes en el expediente en su contra, el sujeto optó por guardar silencio cuando se le dio la oportunidad de testimoniar en defensa propia.
Finalizado el acto procesal, la policía trasladó nuevamente al detenido a su domicilio particular, donde seguirá privado de la libertad.
Fuentes judiciales señalaron que seguramente la semana próxima la fiscal solicitaría la audiencia de control de detención para el depravado, oportunidad en la que volvería a ser examinado por el médico para determinar si debe continuar detenido en el domicilio o bien puede ser alojado en el calabozo.
