La Merced, Paclín
La investigación se originó a finales del año pasado a partir de las denuncias de las alumnas.
Tras varios meses de intensa investigación, la fiscal Alejandra Ruth Antonino logró finalmente reunir las pruebas necesarias para imputar al vicedirector de la Escuela de La Merced, profesor Eduardo Barrionuevo, por abuso sexual simple calificado por su condición de encargado de la educación (hecho nominado primero) y abuso sexual simple en modalidad continuada calificado por la condición de encargado de la educación (hecho nominado segundo y tercero) todo en concurso real y en calidad de autor.
La investigación se originó casi a finales del año pasado a partir de las denuncias de tres alumnas del establecimiento, quienes les contaron a sus padres que el docente, en ese momento maestro de una clase especial, las “tocaba” inadecuadamente cuando tenían clases con él.
El caso fue mediatizado con marchas por parte de los familiares y padres de las compañeras de las víctimas que se solidarizaron con ellos y en diciembre, cuando se llevaba a cabo el acto de colación de grado, irrumpieron en el patio con pancartas y carteles pidiendo justicia para sus hijas. En esa oportunidad, una de las madres tomó el micrófono y le contó a la comunidad educativa allí presente lo que les había pasado a sus hijas, y también mencionó que desde la escuela no habían recibido ninguna contención, por lo que sus hijas quedaron a la deriva compartiendo un mismo edificio junto a su agresor.
Tras las denuncias penales y mediáticas, el Ministerio de Educación intervino y apartó del cargo al docente acusado.
Durante varios meses la fiscal Antonino recabó pruebas tanto periciales, testimoniales y documentales que le ayudaron a llegar a colocar a Barrionuevo como el supuesto autor de dichos hechos.
Fue también, según señalaron las fuentes de la investigación, fundamental la declaración en Cámara Gesell de las niñas víctimas. Pericia que cabe recordar se demoró en poder producirse ante el daño sufrido por las criaturas, que no podían declarar ni con una psicóloga. Tras tratamientos de abordaje, las niñas pudieron sentarse con la psicóloga y relatar lo que habían padecido de manos del docente.
Con todos los elementos reunidos y casi a un año de denunciado los hechos, la fiscalía iba a imputar al docente, sin embargo, la audiencia que iba a realizarse ayer a las 9 de la mañana se suspendió a pedido de la defensa, representada por el Dr. Pedro Vélez, por encontrarse participando en otro juicio vinculado a una causa por drogas. La fiscal Antonino dispuso reprogramar la audiencia de indagatoria de imputado para la próxima semana, dando continuidad al proceso judicial.