El tribunal condenó a Juan Carlos Rojano por el homicidio de Yamil Mercado

POR UNANIMIDAD

Matías Rojano fue absuelto por el beneficio de la duda. En su última palabra, pidieron “poder vivir en libertad”.

Pasado el mediodía de ayer, el Tribunal de la Cámara Penal N° 2, presidido por el juez Luis Guillamondegui, dictó el veredicto de sentencia en el juicio oral en el que se ventiló el homicidio de Yamil Mercado, hecho ocurrido en el año 2017 en Andalgalá, y puso en el banquillo de los acusados a los hermanos Juan Carlos y Matías Rojano.

Por unanimidad, los magistrados resolvieron declarar culpable a Juan Carlos por el delito de homicidio por exceso de la legítima defensa e imponer una pena de cuatro años y seis meses de prisión. En tanto, a su hermano Matías lo absolvieron por el beneficio de la duda.

El veredicto de sentencia se leyó con la presencia de la viuda en la sala, quien se constituyó como querellante en la causa.  En la lectura, el tribunal fijó también fecha para dar a conocer los fundamentos el próximo 6 de noviembre a las 12.00. 

La audiencia de ayer se abrió con la última palabra de los imputados, quienes pidieron “poder vivir en libertad”.

Cabe recordar que durante la jornada del martes, las partes expusieron sus alegatos. El fiscal Augusto Barros solicitó la pena de 14 años de prisión para Juan Carlos por el delito de homicidio simple y no por el de homicidio agravado por alevosía, como había llegado a juicio, y la absolución por el beneficio de la duda de su hermano, Matías Rojano.

Finalmente, los jueces Luis Guillamondegui, Silvio Martoccia y Miguel Ángel Lozano entendieron que la acción desplegada por Juan Carlos sobre la persona de Yamil Mercado, quien fue golpeado en la cabeza con un pedazo de hierro, no configuraba el delito de homicidio simple sino el de homicidio por exceso en la legítima defensa, por lo que fue declarado culpable por dicho acto y condenado a cuatro años y seis meses de prisión efectiva.

Pese a la condena impuesta, Juan Carlos Rojano, quien llegó en libertad al debate, no irá a la cárcel hasta tanto quede firme la sentencia.

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