En el Tribunal Oral en lo Criminal Federal
El abogado escuchó el veredicto desde la ciudad de Pergamino en Buenos Aires. La Fiscalía había pedido seis años de prisión.
Minutos después de las 13 de ayer, los jueces del tribunal oral federal Dres. Mario Martínez -presidente-, Julián Falcucci y Federico Bothamley se constituyeron en la sala y reanudaron el cuarto intermedio con la lectura del veredicto de sentencia.
Mientras en la sala estaban presentes los imputados Pablo Frías, Marco Reartes, Marcos Soruco, Ramón Baigorri, Gabriel Lazarte, Roque Vizcarra, Emilce Araoz, el abogado Juan Pablo Morales escuchó el veredicto a través de zoom en la delegación de la Policía federal de la ciudad de Pergamino, provincia de Buenos Aires.
El veredicto arribado por unanimidad fue el de la absolución por el beneficio de la duda para el excamarista Juan Pablo Morales, para quien la Fiscalía había solicitado el pasado 7 de noviembre la pena de seis años de prisión por el delito de comercialización de estupefacientes en calidad de autor.
Previo al veredicto a Morales, la secretaria informó la absolución por falta de acusación fiscal del imputado Roque Vizcarra, la condena de seis años de prisión para Pablo Frías por el delito de comercialización de estupefacientes en calidad de coautor, calificación legal que compartió con Marco Reartes, a quien lo condenaron a la pena de seis años y seis meses de cárcel y fue declarado reincidente por segunda vez. El tribunal resolvió también absolver por el beneficio de la duda a Ramón Baigorri, Marcos Soruco, Gabriel Lazarte y Emilia Araoz.
Para todos ellos la Fiscalía había solicitado en sus alegatos penas que iban desde los seis años a los dos años de prisión, criterios que no fueron compartidos por el tribunal, para quien hubo dudas de la participación de los mencionados en los delitos endilgados por la Fiscalía.
En la parte final de la sentencia, los jueces hicieron lugar al planteo del Ministerio Público Fiscal y ordenaron el decomiso de la sustancia incautada, como así también que el dinero secuestrado en los procedimientos que llevaron al dictado de sentencia en contra de Reartes y Frías sea donado al Hospital de Niños Eva Perón.
Última audiencia
La última audiencia inició cerca de las 10. En la oportunidad, con la presencia en la sala de los tres jueces del tribunal, el presidente Dr. Mario Martínez le consultó a cada uno de los imputados si iban o no a hacer uso del derecho de la última palabra. Marco Rearte fue el único en sentarse ante el estrado. Básicamente, el ahora condenado le pidió al juez que “haga justicia”, sostuvo que el dinero secuestrado no era de él y que “quería cuidar y educar a mi nieta de dos años”. “Es una locura los siete años que me pidió la fiscal. Yo tengo antecedentes u condenas, pero fueron por asalto, nunca tuve que ver con la droga (…)”, expresó Reartes.
Luego, se vivió una situación particular cuando el presidente del tribunal le preguntó al Dr. Morales si iba a hacer uso de la última palabra.
A través de Zoom, Morales quien participó de esa forma durante todas las audiencias, expresó su intención de dar su última palabra e inició dirigiéndose al tribunal, pero fue casi de inmediato interrumpido por el presidente, que le pidió que encendiera la cámara. En la pantalla del recinto no se podía ver al Dr. Morales, pero sí lo escuchaba. Luego de un par de minutos y ante fallidos intentos de “encender” la cámara, el juez Martínez le pregunto a Morales -quien dijo que solo esperaba a que se hiciera justicia- si estaba dentro de la provincia, respondiendo el letrado que sí. De inmediato, Martínez le dijo que tenía 15 minutos para constituirse en la sala para esperar la lectura del veredicto a las 13, pasando seguidamente a un cuarto intermedio.
Finalmente, el abogado Luciano Rojas le habría explicado al tribunal que Morales, su cliente, no estaba en esta ciudad, sino en Pergamino, provincia de Buenos aires. Ante esta situación, lo magistrados resolvieron que Morales se trasladará a la Delegación de la Policía Federal de aquella ciudad y, desde allí, se conectara para escuchar el veredicto, lo que finalmente se concretó y Morales escuchó el veredicto de su absolución por el beneficio de la duda.