El cura abusador no declaró y la querella pidió la detención

ABUSO ECLESIASTICO
El cura Eduardo Raúl López Márquez se presentó hoy en la sede de la Fiscalía Penal de la Sexta Circunscripción Judicial y se abstuvo de declarar. «Los abogados querellantes pidieron su inmediata detención. «A Muña Muña lo llevaron preso ahí nomás y a Márquez no; parece que la sotana le da inmunidad», cuestionaron los defensores de las víctimas.
El sacerdote, se encuentra imputado por tres hechos de “abuso sexual” y «corrupción de menores».

La querella un joven de apellido Batallan, representado por los abogados Sebastián Ibáñez y Bruno Jerez, solicitaron la inmediata detención de López Márquez por imperativo de ley. La cual aún no se hace efectiva.

La denuncia por abuso sexual en la infancia (ASI) fue presentada en el año 2021 en La Paz. Los ultrajes habrían sido cometidos en 2002.

Durante años el denunciante guardó silencio hasta que pudo relatar lo sucedido.

En un primer momento, la fiscal Jorgelina Sobh había considerado que el abuso estaba prescripto y ordenó su archivo. Sin embargo, la querella se opuso y la jueza de Control de Garantías Corina Pérez resolvió la impresctibilidad del abuso sexual infantil, basada en fallos anteriores como la del cura Moisés Pachado

La defensa de López Márquez apeló Cámara de Apelaciones en lo Penal y de Exhortos, integrada por los jueces Elena Berrondo Isí, Mauricio Navarro Foressi y Fernando Esteban resolvió no hacer lugar.

La caratula Penal.

La fiscal Virginia Duarte Acosta imputó al cura por los delitos de «abuso sexual gravemente ultrajante calificado por la situación de guarda y por ser cometido por un ministro de culto en calidad de autor», y «corrupción de menores agravada por la guarda de la víctima, en calidad de autor, en concurso ideal».

Por un segundo hecho fue imputado por «abuso sexual con acceso carnal, calificado por la situación de guarda y por ser cometido por un ministro de culto, en calidad de autor» y «corrupción de menores agravada por la edad de la víctima, en calidad de autor». El tercer hecho que se le endilga es de «abuso sexual con acceso carnal, calificado por la situación de guarda y por ser cometido por un ministro de culto, en calidad de autor» y «corrupción de menores en calidad de autor, en concurso ideal».

Los abogados de la víctima Ibáñez y Jerez, argumentan que debe ser detenido y así lo pidieron en un escrito presentado ante la Fiscal subrogante Duarte Acosta.

El «pervertido del supermercado» y el Vendedor de yuyos «Muña Muña» fueron detenidos inmediatamente. ¿Por qué una persona con sotana y acceso al poder eclesiástico goza de otra suerte procesal?. El abogado y psicólogo Bruno Jerez manifiesta que al parecer hay dos códigos penales uno para el rico y poderoso y otro para el pobre. Esta inequidad ante la ley levanta serias sospechas en el justiciable. Ibáñez por su lado sostiene que los extremos legales para la inmediata detención se encuentra acabadamente reunidos.

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