EDGAR BACCHIANI: DEL TRADEO A LA EXTORSIÓN
La amenaza fue a un acreedor cuya pareja -abogada cordobesa- le había iniciado una acción penal por falta de pago, a cambio de que levante la denuncia y acceda a chances de recuperar lo invertido.
A mediados de agosto una fiscal de la Provincia de Córdoba que investigó a Edgar Bacchiani pidió enviarlo a juicio oral y público por 50 hechos de estafas reiteradas y comenzaron a conocerse detalles de la investigación y las pruebas producidas en el marco de la investigación, que se inició al mismo tiempo que comenzaba la causa en el fuero Federal de Catamarca.
Bacchiani, autoproclamado «exitoso trader de criptoactivos», quien fundó junto a su expareja y socia Zaraive Celeste Garcés Rusa la empresa Adhemar Capital SRL con sucursales recaudadoras en Tucumán y Córdoba, terminó extorsionando a sus clientes que exigían los pagos de utilidades prometidas y la devolución de los capitales invertidos.
De acuerdo a lo registrado en una escucha telefónica efectuada a Bacchiani a fines de marzo del año pasado y en plena cesación de pagos (fue detenido el 22 de abril), recibió una llamada de un inversor -cuya esposa abogada había iniciado acciones legales contra el trader por sus incumplimientos-, que le reclamaba la devolución de aproximadamente 120 mil dólares.
«…Lo que pasa es que si vos no la hacés entrar en razón yo voy a hacer todo lo que dije (quemar una casa que podía presentar como caución o entregarse a la Justicia de Córdoba para que lo detengan), porque tengo los huevos para hacerlo», le respondió Bacchiani.
«Yo negocio al revés, soy un tipo que viste, muere de pie. Yo te la hago corta: levantá la demanda, yo negocio con ustedes. NO la levantan, voy y prendo fuego a mi casa (…) y van a tener que hacer un embargo quemado que no sirve absolutamente de nada y encima no cobran más», amenazó.
«Yo enfrenté al gobernador, al gobierno, enfrenté a tipos poderosos y sigo acá y es porque tengo huevos para hacer muchas más cosas acá», agregó.
Ante el apriete, el acreedor le respondió: «Ya sé (…) solo soy un boludo que quiso crecer un poco más, puso la guita de ahorro y dije guau; gano 20 lucas por mes y por eso nos metimos todos».
Bacchiani le exigió que su esposa levante la demanda y le apuntó: «Te dejo 4.000 catamarqueños en tus manos y mi fianza en Córdoba. Mirá qué fácil (…) 4.000 personas confían en mí, vos no podés confiar… fijate… te van a linchar. Yo te digo en serio… a la gente le estás coartando la posibilidad de cobrar. A mí no me gusta la violencia pero la gente en este contexto en el que estamos… la gente me tocan y parece que tocan…».
Intimidado y con todo por perder, el damnificado le respondió: «Tengo 47 años y nunca peleé ni con mi hermano. Dejame hablar con la bruja y te mando un mensajito». n
«Él elige ir en cana para salir y quedarse millonario»
El 18 de abril de 2022, el abogado de Bacchiani Lucas Retamozo conversó con uno de los principales poceros de la empresa, Pablo Olmi.
«Él elige ir en cana, no sé cuánto tiempo, para después salir y quedarse millonario porque le tiene más miedo a ser pobre que ir en cana», aseguró Olmi.
Mientras la crisis por la cesación de pagos también arreciaba en Córdoba y se realizaban reestructuraciones de deudas en forma arbitraria, se percibía que era inminente la detención de Bacchiani en Catamarca. En este contexto el «trader» fue internado en una clínica de calle Junín. «Se la quiere quedar toda el negro este. Quiere ir en cana y quedarse con la guita. Él cree que va a ir a una cárcel VIP con todas las cosas», agregó Olmi.
El abogado respondió: «Hay cosas que no podés comprar, ni fiscales, ni jueces, ni nada. Se le acaba la… la cava (SIC)».
«Que se quede solo con la Sofía (Piña, abogada, expareja de Bacchiani), ¡A la bosta!», finalizó Olmi. Finalmente, el 22 de abril de ese año Bacchiani fue detenido en Catamarca junto a sus principales laderos, José Blas y Alexis Sarroca.