La Justicia aguarda la visualización de los celulares
La mamá y abuela de las niñas negaron rotundamente la acusación de la Justicia y pidieron volverlas a ver.
Si bien la causa sobre las dos niñas de 11 y 12 años, supuestamente rescatadas el fin de semana por la Policía tras una orden de la fiscal de la Unidad de Violencia Familiar y de Género de aberrantes prácticas de índole sexual que podrían encuadrar en el delito de trata de persona de su propia familia, parece no avanzar ante la demora de la asistencia a las niñas, ayer este diario pudo conocer nuevos y escalofriantes datos del expediente.
Voceros oficiales informaron que, además de ser supuestamente objeto de abuso sexual, las niñas, a cambio de dinero, eran fotografiadas y filmadas, según presume la Justicia, por su propia madre. Las imágenes luego habrían sido intercambiadas también por dinero a través de los teléfonos celulares.
Estas pruebas darían cuenta del aberrante calvario que vivieron las niñas de parte de quienes tenían la obligación de cuidarlas. Según se desprende de la denuncia que realizó la vicedirectora de la escuela a la que concurría la mayor de las niñas, la chica le contó que sus familiares las obligaban a desnudarse y sentarse en unas sillas de plástico a las que las ataban desde sus muñecas y las “exhibían” a los supuestos clientes, quienes las tocaban y hasta las obligaban a usar un consolador, elemento con el que eran fotografiadas y filmadas. Y, que, según la información judicial, fue secuestrado el último sábado durante los allanamientos en el domicilio en el que residían las niñas. Este fue encontrado entre las prendas íntimas de las víctimas en un cajón en la habitación donde dormían.
En ese procedimiento los investigadores también secuestraron los cuatro teléfonos celulares de las tres mujeres que convivían en la casa allanada junto a las niñas, siendo la madre, una tía y la abuela.
Hasta el cierre de esta nota y tras haber consultado a la Justicia, no había fecha que determinara cuándo las niñas podrían declarar en la Cámara Gesell, porque al parecer no habían sido aún evaluadas por las profesionales, a más de cuatro días de haber sido supuestamente puestas a resguardo del Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
Antecedentes
Por otra parte, se conoció que la familia de las niñas se encuentra hace pocos meses residiendo en esta ciudad capital. Hasta el momento, las víctimas continuaban concurriendo a la escuela de Capayán.
Entre los meses de abril y mayo pasado el tío de las niñas, quien sufre un retraso madurativo, fue declarado inimputable por la Justicia, luego de ser detenido por haber intento abusar de una niña en la playa de estacionamiento de un supermercado de la Capital.
La familia debió dejar su casa, ubicada en el departamento Capayán, luego de que los vecinos amenazaran con quemarle la casa porque temían que el joven volviera a abusar de las niñas del barrio. Actualmente, el tío de las niñas continúa internado en el sector de Salud Mental del Hospital San Juan Bautista.
Hablaron la madre y la abuela de las niñas: “Vinieron y me sacaron a mis hijas sin decirme nada”
Desde el sábado 2 de noviembre dos niñas de 11 y 12 años se encuentran a disposición del Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes y de la Fiscalía de la Unidad de Violencia Familiar y de Género, tras ser supuestamente rescatadas de aberrantes prácticas de índole sexual.
En la mañana de ayer, la madre y la abuela de las niñas brindaron una entrevista en Radio Valle Viejo en la que negaron rotundamente la acusación de la Justicia y pidieron “poder ver a sus hijas”.
En relación a la denuncia que dio origen a la investigación, la mamá de las niñas, de quienes se reserva la identidad, expresó: “Ayer -por el lunes- fui a hablar con la directora que fue quien me hizo la denuncia falsa, pero no me atendió y me dijo que me fuera o iban a llamar a la policía, entonces me vine. Ayer, fui a ver a mi hija aquí en el instituto donde está para llevarle ropa y no me dejaron verla tampoco. Salió una mujer y me dijo que me fuera, si no llamarían a la Policía. Ella -por su hija- me vio y se puso a llorar. El sábado estábamos aquí en la casa y vinieron y la sacaron a mi hija y se la llevaron. No me dijeron nada y desde ese día no la puedo ver. No sabemos por qué, si no hicimos nada. Siempre la cuidamos y llevamos a la escuela y le damos el mate cocido a la tarde. Siempre las cuidamos”, remarcó la mamá.
Agregó que les sacaron las identificaciones de la menor, que fue supuestamente rescatada tras la denuncia y que, a causa de esto, “no puede cobrar” un dinero, que se trataría de un plan social con el que se sostiene el resto de la familia.
La mujer explicó que el sábado se encontraban en el domicilio cuando tuvo lugar el allanamiento donde les secuestraron los dos teléfonos celulares a ella y a su mamá, abuela de las niñas, en las que almacenarían fotos y videos de las niñas estando supuestamente desnudas, según consta en la denuncia judicial. “Me ha dicho que le entregue, que si no le entregaba, que me romperían toda la casa y la casa yo la estoy alquilando a una vecina”, explicó la mujer sobre el diálogo que mantuvo con los agentes que intervinieron en el hecho.
“Ellos están haciendo denuncias falsas. Al pedo me la sacó mi nena y yo la tenía, la estaba cuidando bien. Cuidaba la gente del hogar, venía, la veía todo y estaba todo bien la nena”, detalló la mujer, quien agregó: “Nosotros no sacamos fotos desnudas de los hijos, nada”.
Quien también habló sobre la denuncia de la vicedirectora fue la abuela de las menores, otra de las mujeres que vive en el domicilio allanado. “Como fue esta yegua de la directora, porque es una porquería, porque vienen las personas de anuncios falsos como diciendo que a las criaturas las vinieron a violar acá. Que no inventen cosas falsas. Como decir, yo también voy a hacer justicia para que la echen del puesto que tiene la directora, para que no sea una porquería, para que no me trate mal la mente a la criatura”, sostuvo.
“Voy a hacer que la echen a la directora. Las criaturas van a la escuela. Pero a esa porquería que la corran de la escuela, a la basura y a las demás”, ultimó la mujer.
Antes de finalizar la entrevista, la mamá de las niñas manifestó que desde el sábado se llevaron a las niñas y nadie volvió a su casa, ni gente de la Policía ni de la Justicia, por lo que van a buscar a un “abogado para pobres”, para saber qué pueden hacer porque quieren que les devuelvan a sus hijas.